VINLANDIA DEL SUR
Una esquina abierta. Una espina acierta.
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Quekán
miércoles, 28 de abril de 2010
Pedidos.
Cara de loco
El diablo y la monja (viene una pelea de los mil demonios)
Operador
Dracorbata
Terraza
Horizontal
Mando Diao
lunes, 26 de abril de 2010
Foto a falta de algo más.
La ciudad se acaba en algún punto, no se puede extender al infinito, pero no lo cree, y no conoce algo como un final tajante, se desparrama y amenaza con seguir creciendo. Es el espacio donde viven los olvidados entre más lejos en esta dirección más olvidados y negados son sus habitantes. El no pensar los lugares donde vivirán las personas, no es otra cosa que olvido, un olvido que para los alcaldes es más fácil que ser buen gobernante.
Le dijo el gato blanco al perro negro que pronto se iría, este le creyó y salió corriendo, para buscar a donde ir, para buscar un lugar de donde no se fuera de nuevo.
Sentado sobre la única esfera le grita desafiante al mundo, gobierna en su interior, y le basta.
Esas grandes rocas las quiero y mucho, ya que
estaban aquí antes de esa mañana y es probable que cuando olvide que estuve ahí, aún sigan estando sin que les importe mi descuido.
Ellos se fueron, la dejaron, jamas volvieron, y apostaría mis uñas de los pies que no la recuerdan, pero ella aún espera que las voces la recorran, está harta de que le pasen por el lado personas que no conocen y sobre todo personas que no la conocen y se atreven a inventarle moradores imaginarios y mezquinos. No le molesta que le imaginen vida, eso no, pero le entristece que siempre sean brujas o duendes, ¿acaso siempre estuvo derruida? ¡Pues no! ella vivió mejores épocas ella vio correr a sus propias personas, y cree que merece algo mejor y sí esas otras gentes no lo creen que se alejen o los llenara de miedos, así al menos sabe que aún evoca algo.
La ventana es una cuenca, no es un ojo no ve nada, no si nadie está ahí para verlo, y encima ahora que alguien entra en mucho tiempo, se para en el lado equivocado mira hacia adentro, pero la ventana como los ojos son para ver lo de afuera, pero nadie de los que ha venido en estos años lo entiende, así que la casa sigue ciega.
"Nadie sabe donde vive, nadie en su casa lo vio, pero todos escucharon a el sapito gro gro gró." Kiko.
La cúpula, me gusta subir aquí y mirar al ver volverse azul, a los arboles pesados moverse y bailar a lo lejos, y ver a los demás desde arriba, ver le movimiento general como un esfuerzo inconsciente de todos, como ese "si nos hubiéramos puesto de acuerdo no nos quedaba tan bien".
Encajaba perfecta en mis manos. anduvo por ahí desde hace mucho, y ahora completa mi triangular geometría, y además encaja aun más perfectamente en la cabeza de unos cuantos que conozco y conoceré.
¡Es el rey! ¡Es Porkys, es Porkys
, y mira como mueve la pelvis!
Aquí ahora hay varios que hacen lo mismo que en vida, sólo que sin televisor al frente de ellos.
Existencia de mundos paralelos, para dos lelos.
Lo que no captura la óptica es la sensación de llegada, lo que se respira en el aire de que hay que salir rápido, que el tiempo empleado para tomar esta foto requiere vencer ese afán sin sentido, y que mecánicamente las piernas quieren moverse porque el bus no lo hará más en el sentido que uno quiere, y todos los demás lo hacen presurosos.
¡Y el hombre voló, y lo hizo con todo el ruido que pudo! ¡Que se entere el cielo!
¿Groenlandia? ¿pero en el cielo de Bogotá?
¡Es tu boca, no me digas que no!
Fila de nubes nuevas.
Huellas digitales de Dios. No, son gotas en suspensión.
A ella le gustan las aberturas en las que el circulo se empata con el cuadrado, y si tiene piel de madera la enloquece, se imagina abriéndola y mirando al exterior, más aún si no lo conoce, y sólo lo ha imaginado.
Sólo los animales vieron cuando se convirtió en luz la primera vez, como de todas maneras los de su raza ya hacían muchas cosas extrañas no les asombro demasiado ver que se volvía en algo intocable y radiante. Después cuando de noche la familia dormía salían a caminar siguiéndolo, cuando era de carne no salía nunca, ahora que tenían a una estrella con ellos sentían la noche como libertad.
Aunque el aire se mueve, es ella quien se ve hermosa en lo simple, por su naturaleza femenina.
Desde abajo, como insecto, lo más común adquiere grandeza, ¿viven otras hormigas en esa copa?.
Sube baja.
New York estilo [Camarón ;) ]
La mechuda es tímida, bueno para lo que le da pena que es más bien poco.
La silueta que te gusta.
La cabeza es un mundo propio.
Una guitarra es una direccional, empuja el espíritu hacia arriba.
Sojubid ollirdal.
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